Besaid

El mesononero tiene que hacer tres viajes para poder traer todo lo que e pedido!!
-Jojo,que aprobecheeee!!!!!
Me pongo a deborar empezando por lo que mas cerca tengo!

El barco me dejó en Besaid, y bajé acompañada de cerca por mi fiel montura. Algunos niños corrienron a verlo, sorprendidos por el tamaño del animal.

N: Puedo tocarlo - dijo uno de ellos

- Claro - dije sonriéndole - se llama Tudik

El chocobo hizo un sonido de satisfacción y agachó la cabeza pra que los niños alcanzaran su pico y pudieran acariciarle. No tardé el alzar a una niña pequeña para que pudiera llegar a la altura de Tudik. Antes de darme cuenta estaba rodeada de niños.

Pago la cuenta,y salgo fuera con dante

-Bueno debo dirigirme al templo con urgencia,nos vemos despues ok??

Observo como un hombre con gabardina roja se acerca. Sin duda es un guerrero y tiene un andar curioso. Se fija en Tudik, para variar, pero me sorprende ligeramente el hecho de que lo mire como si ninca hubiera visto un chocobo.

- Nunca has visto un chocobo? - dije acercándome a él

- Es el animal más rápido que hay - dije orgullosa de mi montura - debeis de ser de lejos para no conocer a los chocobos

Hago una pausa

- Mi nombre es Linae Bryss - dije haciend un gesto con la cabeza a modo de saludo siendo lo más cortes posible

- Era de mi padre, la usaba de vara - la observé - la verdad es que es excepcional, tanto por su poder como por los recuerdos que posee en su interior


Volví la mirada a Dante

- Y qué os ha traido a este lugar caballero Sparda?

- Las personas pueden llegar a ser muy calladas en algunos sentidos - sonreí - yo me dirigía hacía el templo, si lo desea puede acompañarme

- Estoy en peregrinación en busca de iluminación - dije sonriéndo dulcemente - intento volver a mis raices templarias

Comencé a caminar rumbo al templo, dejando a Tudik con los niños, que se divertían con él.

- Durante mi infancia recibí la educación para convertirme en invocadora - hice una breve pausa - pero debido a infortunios de la vida tuve que abandonar lo que sería mi futuro, ahora que mi vida se ha sosegado quiero intentar recuperar esa educación

antes de que nos dieramos cuenta estabamos en la entrada del templo. Lo observé detenidamente, era hermoso como la mayoría de los templos de esta tierra. Dentro había un hombre, delante de la estatua del Gran Braska.

[Comienzo Krattos]

Desperté en la posada con un ligero dolor de cabeza. Me levanté y fui al baño a lavarme la cara. Me miré al espejo y descubrí la mirada cansada de un guardián incompleto, un guardián sin invocadora.
Mi idea era venir al templo de Besaid en busca de algún invocador, ya que, solían comenzar su peregrinación en esta aldea.

—¡Buenos días!-dijo el posadero.

Yo le sonreí e hice un ademán con la cabeza, no me gustaba demasiado entablar conversación con las demás personas.

Salí de la posada después de empuñar mi arma y me dirigí hacia el templo.

De camino a casa oi una voz que me llamaba

?¿?¿: Lady Yuna!! Lady Yunaaaa!!!

Al girarme vi que se trataba de Danna, una chica Albhed, amiga de Rikku



- Danna, ¿Que ocurre?

D: Tiene que ayudarme Lady Yuna, me estan persiguiendo, llevo huyendo desde el desierto de Bikanel, he venido a buscarla para que me proteja, por favor

- Pero... ¿Quien te persigue? y ¿Por que?

D: Una mujer y un hombre, creo que son aliados de Darickson, no se que quieren, pero vienen a por mi - dijo casi llorando

- Tranquila, ven conmigo, vamos al templo, alli estaras a salvo

D: Gracias Lady Yuna

[Sigue en templo de Besaid]

Me despierto en la playa y doy un pequeño bostezo. Miro a mi alrededor mientras me levanto y me estiro un poco.

- Umm... ¿Donde...?

Dije frotandome los ojos.

- Esto es, la playa de besaid, ya me acuerdo... ire al pueblo...

Dije lo ultimo iendo hacia el pueblo mientras sonreia como siempre aunque estaba un poco mareado.

LLegue al pueblo y fui a visitar a Wakka y a Lulu pero no les vi en su casa.

- Estaran rezando en el templo a lo mejor... quien sabe, quizás me alla perdido algo.

Dije pensando en voz alta... Entonces me dirigo al templo.

[Continua en el templo de Besaid]

Sin esperar demasiado me marché a la posada. Era una casa pequeña, del mismo tamaño que las demás, aunque esta tenía más habitaciones acopladas a los lados.

Entré en la habintación que había pagado, dejé mi bastón a un lado y luego, una vez en la cama, me puse a meditar.

[Viene del templo]

Tras descansar, me dirigi a la playa a esperar a los demas.